Sin embargo, numerosos Estados han promulgado leyes que suponen definiciones mucho más amplias, utilizando con frecuencia términos y conceptos muy generales, vagos o ambiguos.
Por último, los límites entre la delincuencia, los conflictos y el terrorismo quedan poco claros en el contexto de las armas pequeñas y ligeras ilícitas.
También se observó que si se incorporaba el concepto de riesgo en el proyecto de protocolo, seguiría habiendo cierta ambigüedad, pues el riesgo era una noción subjetiva.
En segundo lugar, la expresión “operaciones de consolidación de la paz” adolece de precisión jurídica, por lo que da pie a ambigüedades conceptuales que deben ser evitadas.
El CICR teme que, por su ambigüedad, ofrezca a las partes en un conflicto una escapatoria para eludir o reducir al mínimo la obligación relativa a la detectabilidad.