Desgraciadamente, incluso con instalaciones cedidas gratuitamente, los gastos de funcionamiento de un centro de información en Luanda serían prohibitivos.
Desgraciadamente, la distancia entre las expectativas despertadas por esa reforma y los beneficios experimentados por los ciudadanos comunes se agrandó constantemente.
Desgraciadamente, en lugar de convertirse en un conducto importante para el diálogo regional, esas conversaciones fueron interrumpidas por otro Estado de la región.
Desgraciadamente, las medidas que adopta Israel para suavizar la situación humanitaria conducen únicamente a una mayor intensificación de los esfuerzos de los terroristas.
Desgraciadamente debemos señalar que, casi un año después de la firma del acuerdo, la UNMIK no ha cumplido las obligaciones que le incumben en virtud de esas convenciones.
Desgraciadamente, más de 40 Estados no han suscrito aun la prohibición de las minas antipersonal, y algunos países, así como numerosos agentes no estatales, siguen fabricando y vendiendo dichas minas.